A todos nos ha pasado alguna vez. Nos hemos obligado a nosotros mismos a una sesión “brainstorming” y no ha “llovido” una sola idea (por culpa de la sequía por la que atraviesa nuestra creatividad).
Para colmo de males la fecha tope que nos han impuesto para entregar el proyecto (encallado) que tenemos entre manos se acerca peligrosamente y no hay ideas sobre la mesa.
Si está siendo víctima de un temible bloqueo creativo y necesita urgentemente zafarse de sus afiladas garras, le proponemos alimentar sus hambrientas neuronas con las nutritivas charlas TED que propone a continuación Hootsuite en un post en su blog corporativo:
1. “How to find a wonderful idea”
En “How to find a wonderful idea” la banda estadounidense de rock OK Go disecciona su particular manera da afinar la creatividad.
Para hacer suya la anhelada creatividad, OK Go no piensa en la ideas sino que sale activamente a su encuentro.
Cuando se enfrenta a una sesión de “brainstorming”, la banda sigue los siguientes pasos:
- Piensa en una primera idea y diseña un plan para hacerla realidad.
- Rebobina y reexamina la idea original.
- Revisa de nuevo todo el trabajo hecho hasta el momento.
- Da pasos hacia adelante (y también hacia atrás) hasta que la idea que hay sobre la mesa se metamorfosea en una estrategia sólida y verdaderamente factible.
- Ejecuta la idea
2. Four lessons in creativity
La escritora Julie Burstein tiene el pleno convencimiento de que la creatividad, esa que con tantísimo denuedo todos buscamos, es deudora de cuatro aspectos:
- La experiencia. Es de vital importancia prestar atención a lo que acontece a nuestro alrededor y estar abiertos a nuevas experiencias, en cuyas entretelas podría haber enhebradas nuevas posibilidades creativas.
- Los desafíos. Las mejores ideas emanan a veces de los periodos y circunstancias más difíciles con las que nos topamos en nuestro periplo vital.
- Las limitaciones. Zarandear (a porrazo limpio) nuestras propias limitaciones es una buena manera de espolear las fortalezas que hay agazapadas en nuestras entrañas.
- La pérdida. Para enfrentarnos con garantías a la creación debemos inevitablemente posar la mirada en el semblante más feo y amargo del mundo (donde lamentablemente hay guerra y muerte).
3. How boredom can lead to your most brilliant ideas
La suya es una teoría a priori contraintutiva, pero la especialista en podcasts Manoush Zomorodi asegura que el aburrimiento es arma creativa de inconmensurable poder.
Cuando ponemos nuestra mente en piloto automático (porque estamos aburridos), nuestro cerebro alumbra nuevas conexiones neuronales y tales conexiones neuronales se traducen en nuevas ideas y en soluciones a problemas.
Un experimento emprendido por Zomorodi en colaboración con un grupo de investigadores concluyó que las personas que nunca se aburren son menos creativas cuando se enfrentan a la planificación y a la resolución de problemas.
En cambio, el aburrimiento obra el milagro de prender la mecha de las emociones que, convenientemente exploradas, se traducen siempre en ideas.
4. The surprising habits of original thinkers
El psicólogo Adam Grant cree que los pensadores verdaderamente únicos y originales se caracterizan por ser dueños de los siguientes rasgos (100% creativos):
- Abrazan el miedo y la duda. Lejos de lo que pudiera parecer a simple vista, la duda es sumamente vigorizante e impele a aquel se siente embargado por ella a experimentar.
- Procrastinan. Quienes se hacen los remolones y aplazan las cosas que tienen entre manos disfrutan de más tiempo para revolotear en torno a ideas divergentes y alejadas de la norma.
- Dejan fluir las malas ideas. Un ramillete de malas ideas es prueba más que evidente de que al menos lo estamos intentando. Y cuanto más lo intentemos, más posibilidades tendremos de hallar buenas ideas.
5. The playful wonderland behind great inventions
A juicio del escritor Steven Johnson, el juego desempeña un rol importantísimo en la innovación y, por ende, también en la creatividad. Y las empresas pueden introducir mecanismos inspirados en el juego a través de estos 6 enfoques:
- El juego cooperativo, cuyo último objetivo es promover la competencia sana y la camaradería entre compañeros de trabajo.
- El juego que implica riesgos y que hace aflorar las ideas a priori más tontas (para convertir lo que parece inicialmente una auténtica necedad en una gran idea).
- El juego constructivo, que se apoya en artículos como los cubos de Rubik, Play-Doh, el origami y otros objetos táctiles.
- El juego exploratorio, aquel que se inicia sin una meta clara.
- El juego narrativo. Manejar el “storytelling” es vital para sacar el máximo jugo a la innovación.
- El juego físico, donde las habilidades físicas y sociales se ejecutan en un entorno seguro.
6. Why you should talk to strangers
La escritora Kio Stark asegura que hablar con extraños es una fenomenal manera de dar brío a la creatividad. Y lo es porque nos incita a romper las reglas (que hay que hacer añicos para toparnos de bruces con la creatividad), a dejar de lado los prejuicios, y a liberarnos de nuestros miedos.
Para encender los motores de la creatividad debemos salir de nuestra zona de confort y hacer aquello que quizás nunca haríamos (como hablar con extraños).
7. How frustration can make us more creative
El economista y periodista Tim Harford es un acérrimo defensor de la teoría de que los desafíos y los problemas que acogotan los procesos creativos son en realidad positivos.
Desde el punto de vista de Harford, los resultados más brillantes nacen a menudo del vientre de situaciones imperfectas donde hay que sortear determinados obstáculos.
Colaboración: www.marketingdirecto.com