La World Wide Web cumple 30 años y no lo hace en las mejores condiciones. La red de redes que nació como el espacio más libre y democrático, se ha convertido en un nido de amenazas que avergüenza a uno de sus creadores, Tim Berners-Lee.

“Los usuarios se están yendo, tras darse cuenta de que esto de la web que pensaban era tan guay no está ayudando a la humanidad demasiado bien”, ha explicado el padre de internet este lunes en el centro de investigación física de Ginebra, CERN.

“Parece que no acabamos de deshacernos de un desastre de privacidad y ya nos estamos metiendo en otro”, ha añadido mostrando su preocupación sobre la dudosa contribución de las redes sociales a la democracia.

Berners-Lee también se ha referido a la fragmentación de internet en bloques regulatorios en territorios como Estados Unidos, la Unión Europea o China, algo que considera puede ser “enormemente perjudicial”.

No obstante, también se muestra optimista de cara al futuro. En una carta abierta con motivo el 30 aniversario de la web, Berners-Lee incide en la necesidad de seguir trabajando para revertir la situación actual.

“Es nuestro camino de una adolescencia digital a un futuro maduro, responsable e inclusivo”, afirma.

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